Esto pasa si chocas y no tienes seguro de auto

Esto pasa si chocas y no tienes seguro de auto

Un seguro siempre te salvará de gastos que conlleva un accidente de tránsito. Si no lo tienes, tus bolsillos pueden sufrir.

Si chocas contra un vehículo y no cuentas con un seguro de coche, podrías enfrentar serias consecuencias legales y financieras. Por ejemplo, si eres considerado responsable del accidente y no tienes seguro, podrías tener que pagar de tu bolsillo todos los costos relacionados con el mismo. 

De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), un siniestro de tránsito en donde eres responsable podría costar hasta $50,000 mensuales, solo para cubrir gastos médicos por lesiones. 

Por otro lado, el seguro de coche es obligatorio para todos los conductores que circulan en carreteras federales del país. La multa puede ascender a más de $4 mil pesos. 

Además, el seguro también es obligatorio en Ciudad de México, Estado de México, Puebla, Querétaro, Morelos, Nuevo León, Jalisco, Nayarit, Chihuahua, Yucatán y otros más. El monto de infracción varía de acuerdo a las leyes de tránsito de cada entidad. 

Si el choque fue causado por algún tipo de negligencia, puedes ser responsable por los daños y lesiones que causaste a otras personas o a sus vehículos. Esto significa que podrías ser demandado y tendrás que pagar por los gastos médicos, los daños a la propiedad y otros costos relacionados con el accidente.

Por otro lado, si en un percance dañas un poste, baquetas, señales de tránsito o cualquier propiedad pública, podrías tener una causación por daños a la nación y tendrás que pagar o reparar el daño, además de solventar las multas que eso conlleva. 

Ya antes mencionamos que el costo de un accidente de tránsito es elevado y esto se debe a todos los gastos que conlleva un accidente como los pagos en gastos médicos, lesiones, multas y más. Debido a ello, es aconsejable que contrates un seguro de auto, ya que pagará la mayoría de estos gastos. 

En casi todos los que se derivan de un accidente y otros siniestros como inundaciones, vandalismo, incendio, granizo y más fenómenos meteorológicos que cubra la póliza. Aunque todos estos servicios de protección varían en cada paquete de seguros de auto y es que existen hasta cuatro tipos:

• Paquete básico de responsabilidad civil
• Paquete limitado
• Paquete amplio
• Plaqueta premium 

Te explicaremos en qué consiste cada paquete. 

• Paquete básico: solo cubrirá los daños que provoques a terceros en sus bienes y en su persona, incluso incluye daños a la nación. También te ofrecerá servicios de asistencia vial como envío de grúa, gasolina, paso de corriente y hasta de cerrajero.

En cuanto a lo legal, ofrece servicios de defensa jurídica. Mientras que si tú o los afectados sufren de lesiones, también ampara los gastos médicos que resulten como hospitalización, medicina, cirugía, etc. 

• Paquete limitado: cuenta con las coberturas antes mencionadas más la de robo total, en caso de que roben tu coche, la aseguradora te indemnizará. 

Paquete amplio: es de los más completos, porque además de contar con las coberturas de responsabilidad civil, gastos legales, gastos médicos, asistencia legal y robo total, también ofrece la de daños materiales, que cubre los daños de tu vehículo como las reparaciones o indemnización 

• Paquete premium: algunas aseguradoras podrían ofrecerte paquetes adicionales como robo de autopartes, asistencia en el extranjero, daños en neumáticos, gastos médicos a tus mascotas, pago de renta de coche, entre otras. 

A la hora de contratar un seguro de auto, revisa las sumas aseguradas, ya que entre mayor sea el monto, mejor estarás protegido.

En responsabilidad civil se aconseja sumas superiores a los $3 millones de pesos. En gastos médicos el monto de protección debe superar los $300 mil.

En cuanto a daños materiales o robo total, verifica cuál será tu deducible. Este importe es un porcentaje que va del 5% al 15% del valor total de tu coche, y tendrás que solventarlo de tus bolsillos. 

Lo principal es que permanezcas en el lugar del accidente y verifiques que ni tú ni tus ocupantes tengan lesiones. También considera estas opciones: 

1.-  Intercambia información con el otro conductor involucrado, incluyendo nombres, números de teléfono, información de seguro si la tienen y placas del vehículo. Esto en caso de que el otro conductor haya sido el responsable, esta información te ayudará a que puedas exigir el pago de tu daño. 

2.- Si es posible, toma fotos del lugar del accidente y de los daños a los vehículos para tener pruebas.

3.- Si ambos no tienen seguro, es recomendable llamar a la policía, pues debes informar a las autoridades de tránsito sobre el accidente y esperar a que lleguen para hacer un informe y el peritaje debido. 

Será el Ministerio Público quien determinará la culpa del incidente y el monto que debe pagar la persona para cubrir los daños provocados, o en caso de que haya sido el responsable, la cantidad que deberás pagarle al afectado.  

No es recomendable darse a la fuga cuando eres el responsable de un choque, ya que podrías tener consecuencias legales.  Lo mejor es quedarse en el lugar del incidente y llamar a la policía. 

Pero en caso de que te gané el miedo y te des a la fuga puede haber varios escenarios:

• Que haya lesiones graves a los afectados y que ellos determinen tomar acciones legales en tu contra, especialmente por omisión de socorro, ya que no los apoyaste y huiste.
• En ciudades grandes hay cámaras y testigos, si una cámara pudo captar el número de tu placa, podrían citarte para que te presentes a declarar ante las autoridades  y se inicie el proceso.   
• Los afectados podrían demandar pago de daños, no solo físicos y materiales, también morales. 
• Las consecuencias monetarias y legales pueden ser muy altas. Por esta razón, es recomendable que asumas la responsabilidad del accidente e intentes llegar a un acuerdo con el otro conductor. 

Si no estás de acuerdo con el otro automovilista, las autoridades ayudarán a determinar la culpa y el monto de pago. 

La principal razón es por la confianza que tienen los conductores a la hora de manejar y es que varios consideran que son muy buenos conduciendo y que no tendrán un siniestro. Sin embargo, por mucha experiencia que tengas, los accidentes ocurren a cualquier hora del día y por mucho que quisiéramos, no está en nuestras manos evitarlos. 

En México, 3 de cada 10 vehículos están asegurados. De acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), sólo el 27% del parque vehicular del país cuenta con un seguro.

Y es que según expertos, la mayoría de las personas considera que un seguro de coche es caro y lo cierto es que hay tantas aseguradoras en el país y varias opciones de pago que ofrecen, que el gasto es mínimo y la inversión para tu tranquilidad es mayor.